...si un baobab no se coge a tiempo, ya no es posible librarse de éll jamás. Obstruye todo el planeta. Lo perfora con sus raíces. Y si el planeta es demaciado pequeño y los baobabs demaciado grandes, lo hacen estallar.
Si se quiere llegar a se una buena vìctima
es necesario saber de toda la dulzura
que entrelaza al verdugo con la muerte
de la paciencia con que afila su hacha
de la soledad que ilumina su vida
y la de sus inocentes hijos
del esfuerzo que implica portar y levantar el arma
de la sangre que pringa sus pantalones.
Todas estas consideraciones deben estar presentes
en el momento de recoger nuestro pelo sobre la nuca
y poner en sus manos el pescuezo.
Previous Posts
- un dibujo para mi maestra!!!
- "y canté en las aceras y me enamoré de un amor mal...
- Creo que siento algo diferente y en mayores propor...
- Después de Arda... que ardan!
- Me siento solo.quizá más que nunca... pero no extr...
- Monteriano, el despotricador!
- Llegué a casa bastante fumado... con hambre. Abrí ...
- Alcanzaré -me pregunto- a morir a tiempo?
- de paseo!
- Bite Schön!!
Por favor... dibújame un cordero!
Archives
- November 2005
- December 2005
- January 2006
- February 2006
- March 2006
- April 2006
- May 2006
- June 2006
- July 2006
- August 2006
- September 2006
- October 2006
- December 2006
- January 2007
- February 2007
- March 2007
- March 2008
otros asteroides
Open it!
Monday, July 31, 2006
Sunday, July 30, 2006
Monday, July 24, 2006
Acaso no es ella... la luna?
Ya poco puede hacer con las maletas en la puerta, desnuda... sin deseo!! Con la sonrisa grande, pero con aire siniestro, pregunta... Lo saben??? Y ráfagas de dudas caen sobre su pecho, conoce la respuesta... prefiere... Ignorarla. Pero entonces ya son dos, las que caminan a su lado, aunque prefieren dar la vuelta, dejarla sola... en aquellos brazos, llenos de sigilo, de polvos blandos, aferrados a una nuve... que poco a poco va escapando. Ahora solo vuelve... al escuchar su canto. Ohh divino encanto que habeis muerto de llanto. BandaSonora The Offspring - No brakes Powered by Castpost |
Wednesday, July 12, 2006
Hilaria... su muerte, mi vida!
Cuando era muy niño, mi vida transcurría en un apacible ranchito de palma que estaba diagonal a la que hoy es mi casa, era una casa típica de pueblo, con paredes de tablas y pintada de verde y blanco; ahí vivía la señora Marqueza, una viejita amable que vendía queso y otros productos para comer (casabe, suero, bollo y pollo) y con ella, su hijo Alberto e Hilaria su esposa. No sé porqué motivo, ellos eran mis padres, desde que se levantaba Hilaria iba a buscarme a mi casa, aunque estubiera dormido y me llevaba con ella hasta ya muy entrada la noche cuando después de consentirme un poco para dormir, duraba horas contemplándome en una mecedora de palo hecha por su esposo; y él, recuerdo que era camionero, que en contra de la voluntad de Ángela (mi mamá biológica) me llevaba a conocer los lugares que visitaba por su oficio, creo que por eso conocí casi todo mi departamento y cuando me llevaba a otros lugares, hermosos lugares fuera de acá, Hilaria iba con nosotros, para que nos cuidara (a su esposo y a mí). Recuerdo que siempre almorzábamos los tres en la mesa, mi "papáAlberto" en la punta de la mesa, conmigo en sus piernas, aunque comíamos de distinto plato y ella a la derecha de él. Ellos fueron mi primera familia, Hilaria era mi madre y yo el amor de su vida, su hijo. No recuerdo un "no" salir de su boca para mí, una mala palabra o un mal trato, aunque parezca imposible, de ellos nunca recibí algo distinto al amor. Una mañana, desperté en mi cama, en mi casa, y no pude hacer otra cosa que llorar, Hilaria no había ido por mí ese día y me imagino que me sentí muy inestable, y no dejé el berrinche hasta que me llevaron a su casa... y la encontré postrada en su cama. Hilaria había padecido de cáncer desde hace mucho tiempo, situación que yo ignoraba y que no entendía, por cierto. Alberto tenía que ir a trabajar a Barranquilla y sólo lo veíamos los fines de semana, pero eso no importó, ésta vez que quien madrugaba a atenderla era yo; así que yo me levantaba y me iba para su casa, con o sin permiso de Ángela, antes de entrar a su cuarto recogía un vaso de agua al clima para que tomara sus pastillas y luego me quedaba a su lado, contemplándola, la mayoría de las veces me quedaba dormido, luego la ayudaba a entrar al baño, arreglaba su cama y la recostaba nuevamente en la cama. Hasta la hora del almuerzo, porque después ya no dejaban que me quedara. Un día, cuando las cosas habían empeorado bastante, cuando de ella no quedaba sino su piel y su pelo, llegué igual de temprano a su casa y encontré a todos llorando en su cuarto, y sin perder la razón entré allí y ella estaba sentada en la cama y cuando me miró, su sonrisa inundó toda la habitación y me tranquilicé, todo parecía estar bien, subí a la cama (que era como de 1 metro de alta), y me abrazó, la gente iba y venía por la casa, incluso mis padres estaban allí, y de un momento a otro nos quedamos solos, mi mamá, moribunda y yo. Le prometí muchas cosas ese día (cosas que aún no entiendo); que siempre trataría a mi familia como ella me trató a mí y a su esposo, que siempre sería una persona digna y que por encima de todas las cosas que no dejara que nadie me "apagara"; además de muchas otras cosas que prefiero no mencionar... Recuerdo que me pidió que sobara un poco de vicvaporú (no sé como se escribe) en su cuello y en su pecho, y recuerdo como la luz de sus ojos mitigaba y la muerte me la arrancaba de los brazos... (nunca me sentí más solo que esa mañana, con la casa llena de gente, mientras yo estaba en el cuarto, con un cadaver en mis brazos) Desde ese día, Alberto desapareció de mi vida, con todo lo que yo necesitaba de él... se fue para siempre a vivir a otra ciudad, recuerdo haberlo visto como 3 veces desde entonces, cuando ya era mayorcito, solo una de esas pude acercarme a saludarlo, las otras, no sé si huía él o huía yo... Creo que nunca pude ser el mismo desde aquel día en el que murió Hilaria, creo que desde entonces quiero arrancar la vida de alguien para traerla a ella de vuelta, creo que Hilaria es alguien que siempre ha estado en mi vida y morirá nuevamente, conmigo. A veces puedo escucharla, en las noches, en mis sueños, con la respiración profunda, pero fatigada, acariciándome con amor, susurrándome tantas cosas al oido, dándome tranquilidad, dándome amor. Este es solo un breve resumen de la tragedia que viví ese día, quizá tratando de dar una explicación a mi "obseción" con la muerte. BandaSonora Era - The mass Powered by Castpost |
Wednesday, July 05, 2006
Monday, July 03, 2006
Show must go on?
Empty spaces - what are we living for? Abandoned places - I guess we know the score.. On and on! Does anybody know what we are looking for? Another hero - another mindless crime. Behind the curtain, in the pantomime. Hold the line! Does anybody want to take it anymore? The show must go on! The show must go on! Inside my heart is breaking, My make-up may be flaking, But my smile, still, stays on! Whatever happens, I'll leave it all to chance. Another heartache - another failed romance. On and on! Does anybody know what we are living for? I guess i'm learning I must be warmer now.. I'll soon be turning round the corner now. Outside the dawn is breaking, But inside in the dark I'm aching to be free! The show must go on! The show must go on! Yeah! Ooh! Inside my heart is breaking! My make-up may be flaking! But my smile, still, stays on! Yeah! oh oh oh My soul is painted like the wings of butterflies, Fairy tales of yesterday, will grow but never die, I can fly, my friends! The show must go on! Yeah! The show must go on! I'll face it with a grin! I'm never giving in! On with the show! I'll top the bill! I'll overkill! I have to find the will to carry on! On with the, On with the show! The show must go on. Powered by Castpost |