...si un baobab no se coge a tiempo, ya no es posible librarse de éll jamás. Obstruye todo el planeta. Lo perfora con sus raíces. Y si el planeta es demaciado pequeño y los baobabs demaciado grandes, lo hacen estallar.

Si se quiere llegar a se una buena vìctima

es necesario saber de toda la dulzura

que entrelaza al verdugo con la muerte

de la paciencia con que afila su hacha

de la soledad que ilumina su vida

y la de sus inocentes hijos

del esfuerzo que implica portar y levantar el arma

de la sangre que pringa sus pantalones.

Todas estas consideraciones deben estar presentes

en el momento de recoger nuestro pelo sobre la nuca

y poner en sus manos el pescuezo.

Monday, February 12, 2007


Me siento solo.
quizá más que nunca... pero no extraño a nadie,
excepto a mí.

Me siento vacío, hueco.
como si al final todo fuera solo un recuerdo,
que roba el alma e hiela la piel.

Me siento débil, endeble.
como cuando se hereda un trono de rey,
pero no se hereda la fuerza para mantenerse erguido en él.

Me siento infeliz.

Sunday, February 11, 2007

Monteriano, el despotricador!


Ilustración de J. Jesús Fez Jiménez, español.


Despotricar: hablar sin consideración o reparo en contra de algo o alguien.

Despotricar, es el oficio de una persona hueca que no es capaz de leer un libro para tener un tema de qué hablar, de una persona tan infeliz que lleva una vida monótona y se divierte hablando de la vida de la otra gente... y mientras más reprochables sean las acciones, más interesante es la historia.

Es una lástima decirlo, pero la mayoría del habitantes de la "ciudad" donde vivo dedican su tiempo libre a despotricar del prójimo, sin razón, sin ningún motivo... y eso, los hace feliz; pero cuando son ellos mismo quienes caen en la impía red del músculo lingual de sus colegas, sufren más que cualquiera de ellos... Lo curioso del asunto, es que el círculo no se detiene, sino que gira cada vez con más fuerza, aunque con poca inteligencia(jeje).

A la mayoría les encanta inventar historias, y mientras más indigno pueda lucir el otro mejor será... y la historia va de boca en boca, sin ningún alto, sin luz alguna de misericordia... ni piedad.

Además, debo agregar, que siempre son los mismos reproches de siempre... así que, debo preguntar, por qué cada vez que hablan con tanta seguridad de la vida y los sentimientos de las personas que -en todo caso- no conocen, reprochándole los mismo cuentos, se emocionan tanto y se excitan y provocan... y sienten alegría -como quien da una buena nueva- cada vez que más personas se enteran de los chismes, porque eso son, chismes.

En fin, dejemos eso a la gente cuncia, que no se ha podido culturizar. Aunque al final, me alegra darle de comer al pueblo.